Hoy te traemos una receta de las que se consideran platos fuertes. Por lo que resulta muy copioso, por lo que normalmente se come más en invierno que en verano. Pero igualmente deliciosa. El secreto está en su caldo, el cual a templanza el cuerpo.
Se puede decir que esta receta se puede considerar el cocido en Escocia, ya que la forma de comerlo y de servirlo se asemeja mucho. Ya que por un lado se toma el caldo a modo de consomé, depositando la carne y la verdura en una bandeja aparte, para que cada uno se sirva al gusto.
Ingredientes para 4 personas:
½ kg de falda de cordero deshuesada
1 ½ l de caldo concentrado
3 puerros
2 zanahorias
600 gr de patatas
4 cucharadas de cebada
2 de menta seca
2 ó 3 terrones de azúcar
2 cucharadas de vinagre
1 ramita de perejil
1 rama de apio
Pimienta
Sal
Preparación:
Cogemos el caldo concentrado y lo vertemos en una cazuela amplia, poniéndolo al fuego hasta que empiece el estado de ebullición. Mientras cortamos la carne en dado. Cuando empiece a hervir introducimos la carne.
Mientras se va cociendo vamos limpiando y cortando la verdura: Raspamos la piel de la zanahoria y la parte verde del apio. Cortamos en rodajas simétricas junto al apio y metemos acompañando al cordero en la cazuela.
Pelamos las patatas y las lavamos. Y tal cual enteras las metemos también en la cazuela. Sazonamos a nuestro gusto con pimienta y sal y dejamos que vaya cociéndose hasta que empiece a hervir.
En ese momento cogemos la cebada y echamos cucharada a cucharada. Un consejo es, si pesamos que no pueda quedar blanda, dejar la noche anterior remojada en agua, hasta 12 horas, como cualquier legumbre.
Picamos bien la menta seca y la añadimos a la receta junto con lo terrones de azúcar. Removemos constantemente con una cuchara de madera. Cociéndolo muy suave unos 5 minutos. Pasado este tiempo introducimos las cucharadas de vinagre, lo que potenciara su aroma. Dejamos unos segundo más al fuego. Y retiramos.
A la hora de servir normalmente se come separando el cordero y las verduras del caldo, que se sirve en una sopera espolvoreando perejil en su superficie. Aunque eso ya es según las preferencias de cada uno.
Sugerencias:
Si no eres muy fanático de la cebada para cocinar o no encuentras se puede sustituir este ingrediente por arroz normal. Aunque te aconsejamos que sigas utilizando la cebada, pues mejora notablemente no solo el sabor de la receta, sino también su nutrición.