Pimientos Rellenos

Los pimientos rellenos son un plato exquisito que se hace en muchas partes del mundo, la versatilidad en el relleno puede ser única dependiendo de cada uno de nosotros y de nuestros gustos. Aquí os ofrecemos alguna que otra idea.

Pimientos Rellenos de Queso y Gambas

Ingredientes:

5 Pimientos grandes para asar

300 gr. de Requesón

150 gr. de Queso para untar

1 Huevo duro

¼ gr. de Gambas cocinas

¼ litro de Leche descremada

50 gr. de Láminas de almendras

Aceite

Sal y Pimienta

Preparación:

Lava los pimientos y embadúrnalos con aceite de oliva, espolvoréalos con sal marina y coge una bandeja para hornos y colócalos dentro del horno a 200º durante unos 40 minutos.

Dales la vuelta de vez en cuando para que se hagan completos. Ya terminados de asar, coge un bol y llénalo de agua con hielo y ve metiendo uno a uno los pimientos durante unos segundos, de esta manera con el contraste brusco de temperatura se pelaran más fácilmente, cuando los peles procura que no se te rompan.

Cuando ya estén pelados, ábrelos por un lado y retira las semillas y el tallo, que queden de una sola pieza, reserva. Guarda unas cuantas láminas de almendras para decorar y en el vaso de la batidora agrega el resto de las almendras, el queso para untar, el requesón, la leche y salpimienta a tu gusto, tiene que quedar una mezcla un poco espesa, si ves que te queda muy liquida ponle un poco más de requesón.

Coge una cazuela y hierve durante unos 5 minutos las gambas, cuando estén listas apagas el fuego y las escurres. Prepara un bol y agregas en él, las gambas, el huevo duro (partido muy pequeñito) y uno de los pimientos asados, cortándolo muy finamente, revuelve para que todo se una y agregas la mezcla anterior, vuelve a revolver para que todo se una perfectamente.

Coges uno de los pimientos, extiéndelo bien y con la ayuda de una cuchara ve agregando la mezcla y enróllalo como si fuera un canelón (pasta) y así sucesivamente con el resto de los pimientos, hazlo con sumo cuidado para que no se rompa, si quieres, al final de rellenarlo prénsalo con un palillo. Al finalizar agrega algunas láminas encima de cada pimiento. Hay que servirlos frescos.

El sabor del pimiento se acopla perfectamente con otros sabores y por este motivo sus rellenos son muy variados, puedes rellenarlos de carne, pescado, verduras, etc., como será que hasta combina perfectamente con ciertos dulces. ¡¡Pruébalo!!

Besugo con pimientos morrones

Siempre nos parece que hacer recetas tradicionales o caseras son algo compiladas o engorrosas. No os voy a engañar, la de hoy es de ese tipo de platos que nos hace estar encima de los fogones, mimándolo y estando pendientes de él.

Sin embargo, como todo en la vida, el caso es ponerse. Puede que las primeras veces te resulte complicado y no obtengas el resultado que esperabas. Así que hay que practicar, no te desanimes. Además, es una manera muy rica y jugosa de comer pescado. Ideal tanto para la hora de comer como cenas.

Ingredientes para 4 personas:

1 besugo de un kg

700 gr de pimientos morrones

150 gr de harina

6 dientes de ajo

1 dl de aceite de oliva

Sal

Preparación:

Para empezar esta rica y sana receta comenzaremos pelando los dientes de ajo, reservamos. Continuamos descamando, limpiando, descamando y finalmente secando con un trapo el besugo. Ahora le daremos un par de vueltas con la harina y lo mantenemos reservado hasta que lo necesitemos.

Cogemos los pimientos morrones y los lavamos. Una vez limpios los colocamos en una placa de horno. La manera de prepararlos será echando un chorretón de aceite y los asamos unos minutos a fuego medio. Cuando ya estén asados, esperamos que se enfríen un poco y le quitamos la piel separándolos de la carne. Cortamos en tiras y los reservamos para después.

En una cazuela de barro calentamos 4 cucharadas de aceite y la ponemos a calentar a juego lento. Cuando empiece a humear echamos los dientes de ajo enteros. Después añadimos las tiras de pimientos y dejamos que cuezan ambas cosas a fuego muy suave durante una hora, removiendo de vez en cuando con la ayuda de una cuchara de madera.

Cuando pase este tiempo reservamos la primera cazuela y cogemos otra nueva, en la cual echamos el resto de aceite y lo calentamos para freír en el besugo enharinado durante unos 10 minutos por cada uno de sus lados, sazonándolo en cada vuelta al gusto.

Vertemos los pimientos y el ajo de la primera a la del besugo e introducimos en el horno durante 5 minutos a temperatura media.

Cuando pase este tiempo retiramos del horno. Tapamos una cazuela y le damos el último calentón a fuego muy muy suave. Sabremos cuando ya esté porque el pescado quedara muy tierno.

Aleta rellena con pimientos confitados

Este plato se puede comer frío o caliente, por eso es ideal para prepararlo en verano. Además, no es nada difícil de preparar, aunque sí nos llevará un tiempo para la cocción, así que hay que contar con tiempo para prepararlo.

También podemos realizar una variante cambiando la aleta rellena por redondo de ternera, que también quedará jugoso y riquísimo.

Ingredientes para 4 personas:

1 aleta de ternera

Carne picada de ternera para el relleno

Aceite de oliva

Un poco de sal

Pimienta negra molida

2 latas de pimientos del piquillo grandes

100 gr de azúcar moreno

50 ml de salsa de soja

1 diente de ajo

Preparación de la aleta rellena

Sazonar la carne picada con la mezcla de especias «Hierbas provenzales» que podemos encontrar en cualquier zona de especieros de los supermercados. Estas especias le darán un buen sabor y realzarán la suavidad de la ternera.

Se rellena la aleta con la carne picada y se sazona con sal y pimienta.

En una sartén con un poco de aceite doraremos la aleta a fuego fuerte teniendo mucho cuidado de que no se nos pegue ni que se nos salga el relleno.

Una vez que esté bien dorada la colocaremos en una fuente de barro o de cristal apta para horno. Añadiremos el jugo que haya soltado en la sartén y la meteremos en el horno a 200º para que se ase durante unos 40 minutos.

Transcurrido ese tiempo obtendremos un asado tierno y jugoso que hay que dejar reposar unos 10 minutos fuera del horno antes de proceder a su laminado.

Para ello colocaremos el relleno en una tabla sujetándolo bien con un tenedor de trinchar. Si tenemos buen pulso deberemos hacer las láminas lo más finas posible, como un dedo de grosor máximo, para poder apreciar su fina textura y sabor.

Preparación de los pimientos confitados

Mientras asamos la aleta y la dejamos reposar podemos ir preparando los pimientos confitados.

Se abren las dos latas de pimientos reservando el caldo en una cazuela pequeña. Se cortan los pimientos en tiras gruesas y se añaden a la cazuela.

Se pela el diente de ajo y se trocea en daditos pequeños. Se añade el diente de ajo, el azúcar moreno y la salsa de soja a la cazuela.

Se pone a cocer todo a fuego lento durante unos 45 minutos, removiendo de vez en cuando hasta que se consuma el agua que hayan soltado los pimientos.

Una vez troceada la aleta se emplata las láminas añadiéndole unos pimiento confitados.

Consejo

Acompañar el plato con una salsa hecha con mermelada de frambuesa, mostaza de Dijon y caldo de carne y servir con un buen tinto de Castilla.