Aleta rellena con pimientos confitados

Este plato se puede comer frío o caliente, por eso es ideal para prepararlo en verano. Además, no es nada difícil de preparar, aunque sí nos llevará un tiempo para la cocción, así que hay que contar con tiempo para prepararlo.

También podemos realizar una variante cambiando la aleta rellena por redondo de ternera, que también quedará jugoso y riquísimo.

Ingredientes para 4 personas:

1 aleta de ternera

Carne picada de ternera para el relleno

Aceite de oliva

Un poco de sal

Pimienta negra molida

2 latas de pimientos del piquillo grandes

100 gr de azúcar moreno

50 ml de salsa de soja

1 diente de ajo

Preparación de la aleta rellena

Sazonar la carne picada con la mezcla de especias «Hierbas provenzales» que podemos encontrar en cualquier zona de especieros de los supermercados. Estas especias le darán un buen sabor y realzarán la suavidad de la ternera.

Se rellena la aleta con la carne picada y se sazona con sal y pimienta.

En una sartén con un poco de aceite doraremos la aleta a fuego fuerte teniendo mucho cuidado de que no se nos pegue ni que se nos salga el relleno.

Una vez que esté bien dorada la colocaremos en una fuente de barro o de cristal apta para horno. Añadiremos el jugo que haya soltado en la sartén y la meteremos en el horno a 200º para que se ase durante unos 40 minutos.

Transcurrido ese tiempo obtendremos un asado tierno y jugoso que hay que dejar reposar unos 10 minutos fuera del horno antes de proceder a su laminado.

Para ello colocaremos el relleno en una tabla sujetándolo bien con un tenedor de trinchar. Si tenemos buen pulso deberemos hacer las láminas lo más finas posible, como un dedo de grosor máximo, para poder apreciar su fina textura y sabor.

Preparación de los pimientos confitados

Mientras asamos la aleta y la dejamos reposar podemos ir preparando los pimientos confitados.

Se abren las dos latas de pimientos reservando el caldo en una cazuela pequeña. Se cortan los pimientos en tiras gruesas y se añaden a la cazuela.

Se pela el diente de ajo y se trocea en daditos pequeños. Se añade el diente de ajo, el azúcar moreno y la salsa de soja a la cazuela.

Se pone a cocer todo a fuego lento durante unos 45 minutos, removiendo de vez en cuando hasta que se consuma el agua que hayan soltado los pimientos.

Una vez troceada la aleta se emplata las láminas añadiéndole unos pimiento confitados.

Consejo

Acompañar el plato con una salsa hecha con mermelada de frambuesa, mostaza de Dijon y caldo de carne y servir con un buen tinto de Castilla.