Sopa de ajo y patata

Aun a riesgo de parecer un Stark recién salido de Juego de tronos, tengo que decir que se acerca el invierno. Si no has entendido esta referencia, te recomiendo que leas la novela, o al menos veas (muy inferior) serie de televisión.

Sea como sea, se acerca el invierno, con sus heladas y sus bajo ceros. Es una época en la que más que apetecernos, necesitamos calentar cuerpo y alma, de modo que he pensado que podía compartir contigo una receta tradicional de la Submeseta Norte española, donde en Enero el frío es tal que hasta los lobos están deseando llegar a casa para darse una ducha calentita.

 

Sopa de ajo y patata
Sopa de ajo y patata

Cuando te has puesto encima tres camisetas, dos camisas, seis jerseys, ocho abrigos, una manta eléctrica y a un señor que te has encontrado por la calle y, con todo, sigues tiritando de frío, es el momento de hacerse unas sopas de ajo:

Ingredientes:

Toma de la despensa 3 patatas medianas. Como de puño y medio, salvo que tengas una mano como una raqueta, en cuyo caso basta que sean de medio puño. Necesitas también tres dientes de ajo, de esos que te dejan un aliento como para salir de ligue; pan del día anterior; una cucharada de pimentón, dos hojas de laurel, una punta de manteca de cerdo, aceite de oliva y sal gruesa ¿Ya? Pues manos a la obra.

Preparación:

Toma un cazo y ponlo al fuego con un litro de agua. Dentro, pon el laurel, la sal y las patatas convenientemente peladas y picadas ¿Aún no habías pelado las patatas? Veeenga. Que te espero (¡hay que ver! Si es que hay de decírselo todo) (…) ¿Ya? Pues seguimos.

En el mortero, pones los ajos, la sal gruesa y el pimentón ¡Hala! A machacar con ritmo y alegría… chac chac chac… Cuando lo tengas todo bien triturado, échale un poco de aceite de oliva y mézclalo todo muy bien.

¿Te acuerdas de que hace un par de párrafos has dejado un cazo al fuego? Pues ya estará hirviendo. Cuando las patatas estén blandas, añádele el mejunje que acabas de preparar y deja que hierva todo otro ratito. Como cinco o siete minutos.

Ahora corta el pan en lochas lo más finas posible, ponlo en el fondo de un plato –lo ideal sería que de barro- y echa por encima la ración de sopa. Sírvelo tan caliente como lo tolere tu lengua.

Recuerda:

3 patatas medianas

Una cucharada de pimentón

Una punta de manteca de cerdo

3 dientes de ajo

2 hojas de laurel

Pan del día anterior

Aceite de oliva

Sal

En media hora, más o menos, tendrás lista esta sopa tan fácil de preparar.

Sopa de Tortilla

La sopa es uno de los alimentos más elaborados alrededor del mundo. Puede ser hecha por un sinnúmero de ingredientes diferentes, desde un caldo simple hasta  sopas más refinadas de pescado, aguacate, tomates etc.

La sopa de tortitas de maiz o allí también llamadas tortilla puede ser preparada ya sea como plato principal o como una entrada en un almuerzo.

La sopa de tortitas o más conocida en México como Sopa de Tortilla, es una de las sopas más deliciosas que una persona puede comer. Es una receta muy conocida en países latinoamericanos.como México. Puesto que este blog lo leen muchos de ellos, va dedicada a todos vosotros.

Acompañada de aguacate, pollo, ajo, tomates entre otros ingredientes que pueden variar dependiendo de la región, la sopa de tortitas se puede calificar como un delicioso manjar que cautivará al más exigente paladar. 

¿Qué necesitamos para hacerla?

Ingredientes:

8 tortitas de maíz en tiritas

1 taza de aceite

6 tazas de caldo de pollo

2 tomates asados

2 dientes de ajo

1 trozo de cebolla

1 rama de cilantro

1 aguacate

½ taza de queso rallado

1 taza de chicharrón en trozos o pollo deshebrado

½ lata de crema fresca

Chile pasilla al gusto

Sal y pimienta

Preparación

Corta las tortitas de maiz en tiras largas y delgadas, y fríelas. Cuando hayan adquirido un color café ligeramente oscuro, sin que se quemen, sácalas del aceite y escúrrelas en servilletas.

En la misma cacerola donde freíste las tortillas, fríe también el chile pasilla, ten mucho cuidado de que los chiles no se quemen, su color debe cambiar a café no a negro, ya que si se queman adquieren un sabor amargo y desagradable,

Después de freírlos escúrrelos de la misma forma que a las tiras de tortilla.

Cuece los jitomates o tomates un par de minutos en agua hirviendo. Antes de que estén completamente cocidos sácalos del agua y muélelos junto con la cebolla y el ajo,

fríelos en la misma cacerola, sazona con sal y pimienta y agrega el caldo de pollo y el cilantro, deja hervir por 20 minutos a fuego medio.

Sirve en un plato hondo el caldo bien sazonado, debes tener en cuenta que para servirlo tiene que estar bien caliente y unos instantes antes de llevarlo a la mesa  debes agregar  a  cada plato hondo una porción de tortillas fritas.  Acompaña con queso rallado, trocitos de chicharrón, el chile pasilla frito y aguacate en rebanadas.  

OJO: Las tiritas de tortitas no deben estar mucho tiempo en el caldo antes de servirlo, porque se remojarán y la textura quedará pastosa, lo cual no es muy agradable ya que lo ideal es que sea crujiente, por eso se ha de servir por separado y ponerlo en el momento de tomarlo.