Vamos a preparar una receta de pescado muy rica y muy sencilla, pues se trata de cocinar unos filetitos de panga a la plancha. ¿Los riesgos para que salga mal? Apenas hay uno: que se nos pegue el filete en la sartén y que no quede bonito. Aun así, pondremos todo el cuidado del mundo para que eso no pase.
Empezaremos hablando un poco del origen de este pescado que hace tan solo unos años se ha implantado en España de manera espectacular. De hecho, cuando yo era pequeña no lo veías en ninguna pescadería y el panga es famoso por las polémicas que desata.
El panga es un pescado blanco que proviene de Asia. En su fase adulta es un pez de aguas dulces y desde 2004 ha ido creciendo su consumo en este país de forma exagerada por una serie de causas que vamos a explicar.
Fácil de preparar y barato
Los principales motivos de que el panga guste tanto se deben a que es un pescado muy fácil de filetear por lo que su comercialización y envase es sencilla y cómoda. Además, en filetes apenas tiene raspas lo que lo hace idóneo para comer en comedores escolares o residencias de ancianos.
Por otro lado, es un pescado muy barato, lo que supone un claro atractivo para su exportación y su compra. Tanto es así que algunos ya lo han bautizado como “el pez de la crisis”.
Ahora sí: la receta
Vamos a necesitar unos filetes de panga, congelados o frescos. La cantidad idónea para una ración es de unos 200 gramos, pero como no nos vamos a poner a pesarlo es más o menos un par de filetes de esos que venden congelados en los supermercados. Especias: sal, pimentón dulce, curry, pimienta y cebollino.
Si el filete es congelado, lo primero que hay que hacer es dejar que se descongele bien. Procura darle tiempo y no lo metas en el microondas porque se cuece. Este es un pescado con mucha agua, así que cuando se descongele puedes quitar el exceso de agua poniendo el filete sobre un trapo limpio y apretarlo hasta que la tela se empape.
Especiar es la clave
Lo siguiente es salpimentar al gusto los filetes. La panga es un pescado muy soso por lo que no hay que tener miedo si nos pasamos un poco con las especias. Espolvorea por encima el pimentón, el curry y el cebollino.
Por último, pon una sartén al fuego con una cucharada de aceite y cuando esté caliente añade los filetes para que se hagan. Et ¡voilá! listo para servir…