Tortilla de escabeche madrileña

No hay una cosa más española que una tortilla de papas. Cada uno tiene su truco y su forma peculiar de hacerla. Básica o añadiéndole más ingredientes. En este caso te presentamos una receta típica de Madrid, tortilla de escabeche madrileña, donde el bonito en escabeche le roba el protagonismo a la patata.

Posiblemente la historia de esta receta se explique en la forma en la que se conservaban los pescados en el interior de la península, ya que el escabeche era una de las más comunes.

En cuanto al bonito, es uno de los pescados preferidos al entrar en los nominados pescados azules. Característicos por su poco contenido graso y alta aportación de fósforo. Una forma magnifica de introducir el pescado a tu vida.

Ingredientes para 4 personas:

300 gr de patatas

200 gr de bonito en escabeche

4 huevos

1 cebolla

2 ½ dl de aceite de oliva

Perejil picado

Sal

Preparación:

Como cualquier tortilla que lleve patatas, el primer paso siempre es seleccionar las mejores, pelarlas, lavarlas y cortarlas en rodajas finas. Después cogeremos una sartén con profundidad y añadiremos el aceite. Cuando este caliente añadimos las rodajas de patatas y, una vez que se hayan asustado, bajamos el fuego para que se hagan a su amor.

Mientras podemos aprovechar para picar la cebolla. Hay a gente que no le gusta su textura, así que según nuestros gustos podemos hacer los trozos más o menos grandes, rallarla o directamente no añadirla.

En mi caso me gusta y creo que mejora mucho la receta, así que me gusta cortarlas a la juliana. Una vez que tenga picada la cebolla, la añadiré junto a las patatas. Las sacaremos cuando las patatas empiecen a ponerse doradas. Momento de sacarlas con una espumadera para evitar que este muy aceitosa la tortilla. Reservamos.

Cogemos los huevos y los empezamos a batir enérgicamente, añadiéndole algo de perejil picado, que aromatice. Es importante usar un bol grande para mezclar bien todo los ingredientes.

Ahora llega el turno del bonito en escabeche. El cual lo añadiremos a los huevos desmigándolo previamente. Removemos y añadimos las patatas y la cebolla al mismo bol. Mezclamos y sazonamos al gusto.

Cogemos una sartén que dependerá su diámetro de si queremos que la tortilla sea más gordita o no. Intentando que sea una que no se suela pegar las tortillas. Echamos unas gotas de aceite y ponemos a fuego normal. Vertemos el contenido del bol.

Con una espátula intentamos que la superficie quede lo más lisa posible. Cuando veamos que empieza a cuajar en un lado, damos la vuelta para que cuaje en el otro. El tiempo se determina si nos gusta más o menos cuajada.