Comer es uno de los mayores placeres de la vida, y esto lo sabe la inmensa mayoría de las personas en todo el mundo (y quien no se haya dado cuenta es porque no sabe lo que se pierde). Cuando comemos, además de saciar nuestro más voraz apetito, liberamos endorfinas en nuestro cerebro que son las que nos hacen sentir ese verdadero placer en el paladar cada vez que comemos algo que nos gusta.
Seguro que todos nosotros tenemos un plato que nos guste sobre todos los demás. Preguntar sobre cuál es el plato favorito de cada persona en el mundo sería una tarea verdaderamente difícil de contestar ya que en más de la mitad de las ocasiones estas respuestas no coincidirán. En lo que sí estamos seguro que coincide un gran porcentaje de personas es en que el mayor placer culinario es el que ofrecen los postres, sobre todos los caseros, por eso hoy nombraremos algunos de ellos para ir haciendo la boca agua.