Besugo al horno

Hoy voy a explicaros la receta del besugo al horno. Es un receta facil de realizar, que tambien podriais hacerlo con la dorada o la lubina. 

Sobre el Besugo

El besugo es un pez marino que habita en las costas europeas, desde la zona tropical del Oceano Atlántico hasta noruega, y ocasionalmente, en el mar mediterráneo  Vive en bancos pequeños y puede llegar a medir hasta 65 cms de largo y pesar mas de 6 kg. Su cuerpo es alto y comprimido, de color rosado con tonos rojizos en el cuerpo. Los machos tienen una mancha negra característica encima de las aletas.

Algunos trucos adicionales:

A pesar de que es un plato típico navideño, se puede comer en cualquier mes, sobretodo en los meses de invierno que es cuando mejor está y mejor precio tiene, exceptuando la navidad que tiene precios desorbitados.

El modo más tradicional es cocinarlo al horno, pero admite otras preparaciones como a la sal o a la plancha.

Recuerda que el tiempo de cocción en el horno es proporcional al peso, si el peso es mayor pues tienes que darle más tiempo, y si el peso es menor tendrías que darle menos tiempo.

Siempre hay que ir echandole el líquido por encima tanto al besugo como a las patatas para que no se queme. 

Ingredientes

1 besugo grande

2 limones

1 diente de ajo

4 patatas medianas

1 cebolla mediana

aceite oliva virgen extra

sal

pimienta

Vino blanco

Realización

Pidele al pescadero que limpie el besugo, lo vacíe y lo desescame. Corta un limón en medias rodajas, y el otro limon la mitad en cuartos y de la otra mitad sacale el zumo.

Con el cuchillo haz unos pequeños cortes en la parte superior del pescado. Despues, salpimenta el besugo por fuera y por dentro. Coloca medias rodajas de limón en los cortes.

Pela las patatas y cortalas en rodajas. Corta la cebolla en juliana fina. Pon las patatas y la cebolla en el fondo de la bandeja: primero pondremos la cebolla haciendo una capa y despues por encima las patatas en rodajas. Salpimentar, luego colocar por encima de las patatas el besugo. Rociar con un poco de aceite.

Por encima poner los ajos picados en cuadraditos. Rociar con el jugo de limón. Echarle medio vaso de vino blanco.

Meter la bandeja con el besugo en el horno precalentado a 160-170 grados durante 60 minutos. Regular la temperatura para que se dore sin quemarse.

Cuando haya transcurrido este tiempo, sacar del horno y servir.

En resumen…

Cuando hagas esta receta en casa van a quedar encantados contigo.

Escalopines al limón

Si quieres innovar en los platos que día a día ofreces a tu familia, o simplemente tienes un evento especial en el que quieres agradar  a tus invitados los escalopines al limón son una opción ideal por su presencia y sabor excepcional, es muy suave y pueden ser degustados por niños y ancianos gracias a su textura.

Ingredientes necesarios para su elaboración:

Es un plato que resulta muy económico para una familia por utilizar elementos que fácilmente podrás encontrar en tu nevera. Necesitarás un kilogramo de filetes de ternera, cortados en finas capas para que sea más fácil de digerir, pimienta, una cebolla de gran tamaño, concentrado de carne envasado, o bien, algún tipo de caldo que te haya sobrado de otra comida, el de pollo es perfecto, tres limones frescos, harina de trigo, aceite y sal.  Es un plato muy sencillo de realizar, sin necesidad de disponer de grandes conocimientos en la materia, en poco más de 40 minutos tendrás lista tu comida, una buena opción si dispones de poco tiempo.  

Preparación de los alimentos:

Si has comprado un trozo grande de ternera deberás proceder a su corte en finos filetes con ayuda de un cuchillo muy afilado, para mayor comodidad no dudes en solicitárselo a tu carnicería de confianza. El tamaño de cada uno deberá corresponder, aproximadamente, al tamaño de la palma de la mano.

Es importante que estén limpios, es decir, evitar todo tipo de nervios y grasas para que la presencia estética sea mucho mejor y no moleste a la persona a la hora de morderlo, en especial a los niños, a los que les incomoda especialmente esta situación. Cuando finalices esta tarea con un limón es necesario rociarlos, si te vales de un tenedor y lo pinchas te resultará más sencillo que salgan cada una de las gotas.

Por otra parte, en una sartén con un poco de aceite, apenas 2 cucharadas, se sofríen los filetes, vuelta y vuelta, para sellarlos únicamente, y se retiran a un plato cubierto de papel absorbente para deshacerse de los excesos de aceite que pudieran quedar. Aprovechando la misma sartén, previamente limpiada, se cubrirá de aceite, para pochar la cebolla, cortada en gajos finos. Esta tarea requiere de mucha atención y de fuego medio, pues es muy fácil que se puedan quemar y ello repercutiría directamente en el resultado final del plato.

Acompañamiento previo de los escalopines:

Teniendo la cebolla a punto, lo sabrás cuando el color se muestre prácticamente transparente, añade la harina de trigo con ayuda de una cuchara de madera que te ayudará a ir removiendo, poco a poco. Para la integración de los elementos vuelve a echar mano del limón y emplea unas ligeras gotas. En este punto será necesario subir la potencia de tu cocina unos minutos, tiempo en el que deberás introducir la pimienta y el concentrado de carne envasado o caldo, este último se evaporará rápidamente, cuidado con la evaporación condensada que se va a generar, hazlo poco a poco. Si la densidad fuera demasiada emplea tanta agua como sea necesaria para que resulte más diluido.

Proceso final:

Cuando la mezcla esté realizada habrá que dejarla reposar unos minutos a fuego muy lento, cinco minutos serán suficientes, transcurridos los cuales se colocarán los filetes reservados hasta que la mezcla los cubra abundantemente, si esto no sucediera, no te preocupes, utiliza el caldo restante que te haya sobrado, o bien, diluye un cubito concentrado en un vaso de agua.  

Aumenta la temperatura a fuego medio y deja que se cocine durante 15 minutos tranquilamente sin necesidad de remover o de recolocar las distintas piezas, incluso, puedes poner una tapa de cocina sin problemas. No olvides tener la sal a punto en cada momento, puedes emplearla en esta fase o colocarla en el emplatado, esta opción es especialmente recomendada para el modelo de sal escamado que se emplea en muchos tipos de carnes de gran calidad o en platos importantes.

Presentación de tus filetes:

Que se trate de un plato sencillo y gustoso para todo tipo de públicos no quiere decir que no se pueda convertir en un plato excepcional. Elige un plato de diseño moderno, uno geométrico será perfecto, con una espumadera coloca una capa de cebolla como cama para tu carne, esto permitirá que los olores y sabores se impregnen y resulte todavía más sabroso. Si buscas elementos que complemente con tu creación la patata será tu referencia, la podrás preparar al horno con un toque de pimienta negra y sal, incluso manteniendo la piel, en puré si a quien se dirige es a personas con dificultades, o, simplemente fritas pero siendo más sofisticadas aquellas especies de menos tamaño que sólo necesitan ser peladas y que, por sí mismas sorprenden, con un poco de azafrán podrás conseguir un color muy particular.

 

Pan de pasta y tomate

El tomate y la pasta es sólo el comienzo! Este plato también cuenta con tocino, espinaca, batata y tres tipos de queso. de4 a 6 porciones.  

Ingredientes

1 paquete de 454 gramos de penne o cualquier pasta

8 rebanadas gruesas de tocino cortado, picado

1 cebolla grande, picada

1 cabeza de ajo, cortados

1 28 onzasde tomates enteros

1 5 1/2 onzas de pasta de tomate

1 taza de cualquier vino tinto

1 cucharada de orégano

1 o 2 Hojas de laurel

1 camote grande, rallado

1 paquete de espinaca

1 taza de queso ricota

1 taza de queso parmesano, rallado

1 huevo

1/4 cucharadita de sal

1/4 cucharadita de pimienta

1 kgde mezcla de queso

Preparación

Para comenzar con esta receta, se debe precalentar el horno a 375º.
Cocer la pasta en abundante agua hirviendo con sal.

Escurrir y transferir a un recipiente grande.

A continuación, en una cacerola mediana cocinar el tocino hasta que esté crujiente y marrón, unos 15 minutos aproximadamente. Retirar el tocino y reservar a un lado.

Añadir la cebolla y el ajo a la grasa de tocino y cocinar hasta que estén blandas, más o menos 5 minutos.

Agregue los tomates cortados en pequeños trozos, la pasta, el vino tinto, el orégano y la hoja de laurel, y sazonar bien. Llevar a fuego lento. Agregue el camote rallado y cocinar hasta que estén bien suaves, unos 12 minutos.

Añadir las espinacas, revolviendo y permitiendo que el calor de la salsa la marchite. Esta salsa está lista para servir.

Por otra parte, en un tazón mediano, mezclar la ricota, el queso parmesano, el huevo, la sal, la pimienta y la mitad de la mezcla de queso.
Para ensamblar, mezclar la salsa en la pasta.

Incorporar la mezcla de ricota. Verter toda la preparación en un molde para hornear. Cubrir con la mitad restante de la mezcla de queso y el tocino reservados. Hornear hasta que se doren y burbujeen, alrededor de 20 minutos.

Servir y compartir.

 

Lubina al horno

La lubina es un pescado propio de las costas españolas desde el Mediterráneo hasta el Atlántico por lo que es fácil de encontrarla en cualquier pescadería o supermercado a un precio muy económico. Sus dimensiones son aptas para hacer una comida completa para toda una familia por lo que resulta adecuado optar por ella en lugar de por otras especies.

Cocinarla es muy sencillo siendo su sabor muy agradable y suave recomendable también para los más pequeños de la casa, pues sus espinas son fáciles de retirar y no les incomodarán. Una de las formas más conocidas de cocinarla es al horno existiendo muy buenas recetas al respecto.

Ingredientes necesarios:

Es importante elegir una pieza grande para que puedan degustarla una media de cinco personas, un acompañamiento perfecto para ellas serán las patatas por lo que serán necesarias 6 o 7 de tamaño grande para realizar una completa capa como base, también necesitarás ajos, una cebolla, perejil, sal, aceite de oliva y pimienta negra.

Modo de preparación:

En una fuente adaptada para horno se ha de rociar su base con una ligera capa de aceite de oliva para, posteriormente, colocar una capa de patatas, previamente cortadas muy finas. En esta parte será necesario dar un toque de sal y aportar un poco de pimienta negra a cada una de ellas.  En lo que a la cebolla se refiere se utilizarán las cantidades de acuerdo con los gustos de los comensales.

La lubina se colocará entera en la bandeja con tres cortes realizados con un cuchillo debidamente afilado para que su cocinado resulte más sencillo. En su parte superior se colocarán trozos de ajo, perejil y sal gorda, así como un chorro de aceite de oliva. El tiempo de cocinado necesarios es de unos 40 minutos para hornos de potencia media a una temperatura de 150 grados con un golpe de calor únicamente en la parte de arriba los últimos cinco minutos.

Presentación del plato:

Para una correcta presentación de este plato es recomendable que se sigan los cortes anteriormente realizados para extraer las porciones y, sobre las patatas colocarlas. El emplatado se presta a todo tipo de posibilidades que el cocinero quiera realizar siendo productos muy fáciles de manejar y que se adaptan, sin problemas, a cualquier acompañamiento, pimientos o verduras a la plancha, salsas de perejil, salsas de ajo… o cualquier otra que resulte suave y que permita mantener el sabor del pescado.

Espero que sea de vuestro agrado y que os guste a todos!!

Osso-bucco

Hoy nos hemos lanzado por esta receta, con nombre tan gracioso, de origen italiano, concretamente es un plato típico milanés. Su traducción significa “hueso con hueco”, que hace referencia a la carne que se utiliza, por el hueso que en ella hay.

Hay que advertir que es una comida para hacerla con tiempo, pues este tipo de carne está más rica cuando se cocina con un par de horas, aun así es muy fácil de hacer. La receta siempre va acompañada con rissotto, así que la haremos con un rico arroz al azafrán.

Ingredientes:

4 trozos de jarrete de ternera

2 cucharadas de aceite

2 cucharadas de mantequilla

2 dientes de ajo

1 cebolla pequeña

2 zanahorias

1 pastilla de caldo

200 cl (un vaso) de vino blanco

2 cucharadas de tomate concentrado

2 filetes de anchoa en aceite

3 cucharadas de perejil picado

La corteza rallada de un limón

Tomillo

Laurel

Harina

Pimienta

Sal

Ingredientes para el arroz al azafrán:

375 gr de arroz

3 cucharadas de vino blanco

2 pastillas de caldo

½ cucharaditas de azafrán

Pimienta

Sal

Preparación:

Para empezar disolveremos una pastilla de caldo en 2 vasos de agua caliente. Mientras sazonamos la carne y la embarramos con harina. Las echaremos en aceite caliente junto a la mantequilla.

Añadimos poco a poco la zanahoria, cebolla y el ajo picadito.

Cuando ya esté dorado y pochado todo, añadiremos el caldo de la pastilla, el vino, el tomate concentrado y las especias. Tapamos la olla y dejamos cocer a su amor durante una hora y media a fuego lento.

Pasado este tiempo, machacamos en un mortero las anchoas y otro diente de ajo. Lo echamos a la olla y dejamos cocer junto a la mezcla otro par de minutos. Pasado este tiempo ya estará la receta preparada para servir.

La mejor forma de acompañar al osso-bucco es acompañado de arroz al azafrán. Para hacerlo primero disolveremos nueva mente una pastilla de caldo en unos 4 vasos y medio de agua, muy caliente.

Mezclamos primero el azafrán con el vino, lo vertemos al agua junto al arroz. Sazonamos a nuestro gusto y lo dejamos cocer durante unos 20 minutos a fuego lento. Tiempo suficiente para que el arroz  consuma toda el agua.

Una vez tengamos todos los elementos podemos pasar a emplatar o servir directamente en la mesa. Es importante servir el osso-bucco muy caliente, espolvoreando perejil y la ralladura de limón.

Albondiga de carne con macarrones

Si buscas realizar platos para tu familia que resulten ser una opción económica, apetecible y fácil sin duda una de las mejores que podrás encontrar son las albóndigas de carne con macarrones.

Es uno de los platos estrella para los más pequeños de la casa, pues disfrutan con la pasta y el tomate, además la carne les aporta las restantes vitaminas y nutrientes que necesitan para su desarrollo. Un plato proteico que permite afrontar el resto del día con vitalidad y buena cara.

Ingredientes necesarios:

Es un plato muy sencillo que requiere para 5 personas;

100 gramos de macarrones,

600 gramos de carne picada mixta, o en su defecto, un paquete de albóndigas de 16,

sal,

1 cebolla,

1 tomate,

tomate frito,

harina,

aceite de girasol,

aceite de oliva y laurel.

Consejo especial:

Si dispones de poco tiempo para dedicar a la cocina en cualquier supermercado puedes hacerte con albóndigas de carne ya elaboradas,  por el contrario si te gusta el contacto directo con los alimentos puedes aprovechar la carne de ternera y de cerdo de que dispongas en tu nevera, mezclarla con sal, un poco de perejil picado y migas de pan, todo ello bien revuelto para posteriormente y, simplemente con las manos, realizar bolas de tamaño medio.  

 Preparación:

Cuando tengas listas tus albóndigas es necesario enharinarlas con una fina capa para posteriormente freír en una sartén con aceite de girasol a fuego medio hasta que se doren.

Cuando esta situación se produzca se retiran a un plato con papel absorbente para retirar los excesos.

Mientras tanto, en una tartera puedes poner a cocer tus macarrones, a penas necesitas 8 minutos para su cocción con un poco de sal  y otra tartera en la que depositar dos cucharadas de aceite de oliva un poco de tomate natural y cebolla, todo ello bien troceado y 20 ml de tomate frito,  envasado o hecho de modo artesanal.

Las albóndigas, previamente doradas, se colocan cuidadosamente, de modo que el tomate las cubra un poco más de la mitad, se deposita una hoja de laurel y, tras cerrarla, son necesarios 18 minutos de cocinado.  

La mejor presentación

Para presentarlas se recomienda depositar una media de dos a tres albóndigas por plato junto con los macarrones y el tomate de la propia tartera, para finalizar, una ligera capa de orégano es un toque especial y muy sabroso que lo diferencia de la elaboración tradicional.

Y como siempre…

Espero que este plato sea de tu agrado y se lo hagas a tu familia y amigos cuando quieras

Potaje de garbanzos con espinacas

Uno de los platos que más me gustan en la actualidad, e incluso de cuando era una niña es este: Potaje de garbanzos con espinacas, recuerdo cada verano en un pueblo que iba yo de niña, pedía este plato «siempre» que iba al restaurante.

Las legumbres son indispensables en una dieta equilibrada. Combinándola con verdura, como las espinacas en este plato por ejemplo, y con el aporte de proteínas y grasas del bacon forman un plato muy completo que admite muchas variaciones. 

Prueba a condimentarlo con pimentón, comino o cualquier hierba aromática, añadiéndolo al final de la cocción del sofrito de verduras.

Para la realización de este plato puedes utilizar espinacas congeladas, y si tienes poco tiempo, garbanzos cocidos en conserva, lavándolos con abundante agua fría antes de utilizarlos.

El caldo de este plato es bastante ligero, si te gustase más espeso deshaz una cucharada de harina en un poco de agua para la cocción de los garbanzos, y añadela al sofrito cuando esté casi terminado, mantén la cocción unos minutos.

Si estás bajo alguna dieta y el bacon esta fuera de tus posibilidades, no te preocupes, puedes eliminarlo. El plato seguirá siendo igual de bueno y más saludable.

También puedes cambiar las espinacas por acelgas o el bacon por bacalao, y lograr otro tipo de potaje también muy rico.

Ingredientes

300 g de garbanzos

200 g de espinacas

150 g de bacon

1 cebolla

1 zanahoria

1 diente de ajo

1 dl de aceite de oliva

sal

Preparación  

Deja los garbanzos a remojo 24 horas antes en abundante agua salada. Pasado este tiempo, escúrrelos y ponlos en agua templada.

Hierve los garbanzos con un buen chorro de aceite de oliva, déjalos cocer lentamente hasta que estén tiernos.

Pica la zanahoria, la cebolla y el diente de ajo.

Añade el bacon cortado a trocitos no muy gruesos. Rehoga todo en una cazuela con aceite hasta que las verduras ablanden.

Añade las espinacas y remueve hasta que esté todo bien mezclado. Añade agua hasta que quede cubierto.

Cuece durante 10 minutos a fuego suave y después incluye los garbanzos. Añade un poco más de agua, si fuera necesario. Agrega sal y deja hervir unos 5 minutos.

Deja reposar, a servir y a comer!!  

Consejo para una dieta

Si estáis haciendo dieta lo que podéis hacer es cambiar el bacon por carne de pavo, cortada en dados dará un sabor exquisito y saldrá un plato de lo más sano.

Espero que os guste mi receta y se la hagáis a toda la familia.

 

Potaje de garbanzos con espinacas

Uno de los platos que más me gustan en la actualidad, e incluso de cuando era una niña es este: Potaje de garbanzos con espinacas, recuerdo cada verano en un pueblo que iba yo de niña, pedia este plato «siempre» que iba al restaurante.

Sobre este plato

Las legumbres son indispensables en una dieta equilibrada. Combinandola con verdura, como las espinacas en este plato por ejemplo, y con el aporte de proteínas y grasas del bacon forman un plato muy completo que admite muchas variaciones.

Prueba a condimentarlo con pimentón, comino o cualquier hierba aromática, añadiendolo al final de la cocción del sofrito de verduras.

Para la realización de este plato puedes utilizar espinacas congeladas, y si tienes poco tiempo, garbanzos cocidos en conserva, lavándolos con abundante agua fría antes de utilizarlos.   

El caldo de este plato es bastante ligero, si te gustase más espeso deshaz una cucharada de harina en un poco de agua para la cocción de los garbanzos, y añadela al sofrito cuando esté casi terminado, mantén la cocción unos minutos.

Si estás bajo alguna dieta y el bacon esta fuera de sus posibilidades en estos momentos, puedes eliminarlo. Tambien puedes sustituirlo por algo de carne de pavo que seguro le dará gusto y será más sano para esa dieta que estás haciendo.

También puedes cambiar las espinacas por acelgas o el bacon por bacalao y lograr un estupendo y sencillo potaje de cuaresma pero esta ya seria otra receta.

Ingredientes

300 g de garbanzos

200 g de espinacas

150 g de bacon o pavo(regimen)

1 cebolla

1 zanahoria

1 diente de ajo

1 dl de aceite de oliva

sal

Preparación  

Deje los garbanzos en remojo 24 horas antes en abundante agua salada. Pasado este tiempo, escurrálos y pongalos en agua templada.

Hierbe los garbanzos con un buen chorro de aceite de oliva, dejalos cocer lentamente hasta que esten tiernos.

Pique la zanahoria, la cebolla y el diente de ajo. Añade el bacon cortado a trocitos no muy gruesos. Rehoga todo en una cazuela con aceite hasta que las verduras se ablanden.

Añade las espinacas y remueve hasta que esté todo bien mezclado. Añade agua hasta que quede cubierto.

Cuece durante 10 minutos a fuego suave y después incluye los garbanzos. Añade un poco más de agua, si fuera necesario. Agrega sal y deja hervir durante 5 minutos más.

Deja reposar y pon en el plato listo para servir y comer!!

 

Gazpacho andaluz

El gazpacho andaluz es seguramente uno de los platos más conocidos en el extranjero. Como en la mayoria de recetas tradicionales, «cada maestrillo tiene su librillo», y las proporciones e ingredientes dependen del gusto del cocinero, unos no ponen cebolla, otros añade ajo, etc.

El color del gazpacho depende de los ingredientes que le pongamos. El pimiento verde hace que la mezcla tenga un color rojo anaranjado más sugerente. 

Para reducir el efecto ácido del tomate, puede añadir un par de zanahorias en el momento de batir los ingredientes, además mejorará el aspecto visual del gazpacho.

No olvides pasar la mezcla, una vez triturada por el chino para eliminar el pimiento. Al haberlo triturado con piel ésta queda flotando y es desagradable al paladar.

Una vez finalizado puede sazonar el gazpacho con un pellizco de comino molido.

 Ingredientes:

6 tomates maduros grandes

2 pimientos verdes

1 pimiento rojo

1 pepino

1 corazón de cebolla grande

2 rebanadas del pan del día anterior sin corteza

Sal

Aceite de oliva virgen

Vinagre de vino

Agua

Preparación  

Pon a remojo las rebanadas de pan en un cuenco con agua hasta cubrirlas, añade un poco de sal y un chorrito de aceite.

Pela y trocea los tomates, los pimientos sin semillas, el pepino y la cebolla.

Coloca los ingredientes en un bol. Añade el pan con el agua, un chorrito de aceite y de vinagre. Añade algo más de agua.

Tritura con la batidora eléctrica hasta conseguir que emulsione. Añade agua fría y mezcla bien. Comprueba el punto de sal y vinagre,  y añade si hace falta.  

Añade más agua si fuera necesario, hasta obtener una textura de crema líquida. Después una vez ya tengamos la crema líquida será el momento de pasarlo por el chino para eliminar la piel de pimiento verde, pero eso ya al gusto de cada uno.

Introduce lo en la nevera hasta conseguir la temperatura deseada.

En el momento de servir, rocia un chorrito de aceite de oliva virgen si puede ser.  

Mezcla con una cuchara de madera.

Sirve con una guarnición de pepino crudo cortado a dados, cuadraditos de pan (normal o tostado), pimiento cortado en cuadraditos, y cebolla picada.

Cada elemento lo pondremos en un recipiente aparte para servirse cada uno a su gusto.   

En definitiva…

Un plato muy rico ahora que viene el verano, a parte de muy rico en nutrientes también es un plato muy refrescante para toda la familia.

En el mediterráneo y zonas de Andalucía es donde más toman este gran plato por sus altas temperaturas, y en general en toda España pues como digo es muy refrescante y muy fácil de realizar.

croquetas de jamón y ternera

Originaria de Francia, pero totalmente integrada en España , y te puedes preguntar ¿quien no ha comido una croqueta? Yo creo que todo el mundo una vez u otra ha probado una croqueta, y seguramente de diferentes gustos y clases, y según los ingredientes que lleve el picadillo, podrá ser un entrante, primer plato o segundo plato.

La preparación aparentemente sencilla, necesita algo de practica, por lo que no te asustes si la primera vez no te sale como esperabas, con la practica de una y otra vez te irán saliendo más a tu gusto.

En esta ocasión quiero hablaros de esta receta que a mi, en particular, me gusta mucho. 

Algunos consejos

Para conseguir una bonita forma es importante moldearla cuando la masa esté fría. Esto implica que para degustar unas buenas croquetas debemos hacer la masa con unas 8 horas de antelación.

La leche debe estar templada o al menos a temperatura ambiente, si se agrega fría puede originar grumos.

Para freírlas el aceite debe ser abundante, las croquetas deben nadar en él, y estar muy caliente para que se forme una capa fina e impermeable a su alrededor, de manera que no entre aceite en el interior pero el exterior que quede crujiente. 

Las croquetas se pueden congelar sin problemas, antes o después de freírlas. Haga más cantidad y congela las, podrá comerlas cuando le apetezca sin tener que esperar 8 horas.

Ingredientes:

100 gr de jamón serrano picado

250 gr

de ternera picada

1 cebolla grande

150 gr de mantequilla

150 gr de harina

1 litro de leche

Harina, pan rallado y huevo para el rebozado

Sal

Aceite para freír las croquetas

Preparación

Funde la mantequilla en una cazuela. Cuando este fundida añade la cebolla bien picada. Debes sofreír a fuego lento hasta que se haga.

Añade el jamón y la ternera picada. Cuando este hecha, añada la harina. Rehoga unos minutos y agrega la leche templada poco a poco.

Una vez incorporada toda la leche, sazona con un poco mas de sal y si quieres nuez moscada recién rallada, pero es opcional. 

Deja cocer hasta que la masa de las croquetas se separe de las paredes de la cazuela.

Deposita la masa sobre una bandeja ligeramente engrasada, y deja que enfríe totalmente. Haz las croquetas dándole forma con tus manos.

Reboza las croquetas para freírlas, pasándolas por la harina, huevo y pan rallado.

Freírlas en abundante aceite de oliva bien caliente hasta que estén doradas por todas partes, sacar y poner en una fuente o plato para servirlas a continuación.