Troncos sorpresa

Ahora que se acerca el calor, quizás estés buscando recetas ligeras ideales para mantener la línea y poder lucir ese fantástico bikini que tienes en mente. Pero es verdad que resulta un rollo siempre comer ensaladas y las mismas cosas.

Por ello, hoy te traemos una receta rica y original con puerros, de poder disfrutar de todo el sabor de una forma sana y de un alimento que no es muy consumido, pero es altamente diuréticos, para eliminar todos los líquidos a la vez que las toxinas de nuestro cuerpo. Además de los beneficios de su gran aportación de fibra.

Un alimento recurrente y gran aliado en las dietas para personas preocupadas por su peso, ya que tiene muy pocas calorías.

Ingredientes para 4 personas:

4 puerros grandes

1 cucharada de zumo de limón

2 huevos cocidos

5 filetes de anchoa

50 gr de maíz dulce

1 cucharada de perejil picado

3 cucharadas de aceite

Una cucharada de vinagre de vino

tabasco

pimienta

sal

Preparación:

Cogemos los puerros los lavamos bien, seguidamente los secamos y cortamos quitando las hojas y rebanamos por la mitad a lo largo, dividiendo el puerro en dos.

Cogemos las mitades y las cocemos en agua salpimentada durante 10 minutos. Trascurrido este tiempo, los sacamos y los escurrimos retirando todo el agua. Los dejamos enfriar.

Una vez estén preparados ponemos en una fuente a lo largo las mitades y rociamos con el zumo de limón… ¿No se te está haciendo la boca agua?

Mientras cogen el sabor, coceremos los huevos. Trascurrido el tiempo, los dejamos enfriar y los trocearemos y picaremos en trocitos.

Cogemos una lata de anchoas y las lavamos para desalarlas con abundante agua. Las secamos y después las picamos bien.

El maíz podemos comprarlo en mazorca, pero nos resultara más fácil obteniéndolo en latas ya envasadas en donde ya vienen los granos sueltos y dulces.

Cogemos un bol y echamos los huevos ya cocidos y picados, las anchoas y el perejil, el cual también picaremos bien o usaremos ya picado.

En otro bol prepararemos un aliño con el aceite, el vinagre de vino y el tabasco. Dejándolo a nuestro gusto. Añadiremos esta mezcla al anterior bol.

Rellenamos los puerros con esta mezcla. Los colocamos en una fuente preparándolos y decorando el plato con perejil, para finalmente servir.

Este plato se sirve en temperatura ambiente hasta el momento de servir. Aunque en épocas veraniegas se puede servir fresco ¿Ves por qué se te hacía la boca agua?

 

Hojas de col rellenas

La col es una de las hortalizas más ricas en fósforo, que es una sustancia imprescindible en nuestro día a día. Hay muchas personas que no consumen este alimento por no saber cómo o por no gustarles el sabor.

Con la receta de hoy proponemos una forma rica, original y fácil de cocinar un rico plato, que  seguro que le gusta a grandes y pequeños.

Ingredientes para 6 personas:

1 col blanca mediana

400 gr de carne picada

1 huevo

100 gr de cebollas

30 gr de manteca de cerdo

200 gr de tomates triturados

1 vasito de caldo de verduras

50 gr de queso rallado (de la clase que se prefiera)

Perejil

Pimienta

Sal

Preparación:

Se prepara la col, separando hoja a hoja del tronco, sin llegar a romperlas o quitarlas. Relajando los nervios con un cuchillo con cuidado de no partir la col, de manera que se quede abierta.

Se mete la col unos minutos en un cazo de agua hirviendo al toque de sal, para que se ablanden y sean más fáciles de enrollar.

Sobre una superficie limpia y lisa, como puede ser una mesa, encimera o tabla de cortar, extendemos las hojas y espolvoreamos el queso rallado.

Las hojas interiores que no se hayan separado del nervio, las quitaremos y picaremos  muy finas.

En una sartén echamos un poco de aceite y la manteca de cerdo. Rehogaremos la cebolla y la col bien picada. Taparemos con una tapa unos minutos para que se haga mejor y quede bien blanda.

En un bol prepararemos la carne picada. Para eso echaremos encima el huevo, la col y cebolla ya cocinadas, la sal, la pimienta y el perejil (al gusto). Trabajamos bien la mezcla con las manos, amasándolo todo bien.

Ahora colocaremos esta carne sin cocinar encima de casa de cada una de las hojas de col que tenemos colocadas en la superficie plana. Se enrolla y se ata con un hilo o atravesamos con un palillo de madera para que se quede fijado el rollito.

Ponemos un poco de aceite en un cazo o cazuela de barro y doramos estos rollitos por ambos lados. En esta misma cazuela se le añade el tomate triturado y el caldo de verduras y se deja cocer a fuego lento.

Si vemos que el líquido pronto se consume o se queda corto, podemos añadir un poco más de caldo o agua. A la hora de servir, retiraremos el hilo o el palillo y se mantendrá aun enrollado.

 

Muslos de pollo al limón

Cocinar es un placer. Y comer es un placer aún mayor para la gran mayoría de nosotros. Comer comida deliciosa preparada de manera casera es una experiencia que se puede comparar con pocas cosas en este mundo. Por eso, es necesario que seamos personas con recursos suficientes para preparar cualquier plato en cualquier momento que tengamos invitados en nuestra casa a la hora de comer.
Seguro que se nos ocurren una multitud de paltos para poder cocinar cualquiera de esos días en los que esperamos a alguien a comer en nuestra casa. Pero para aquellas personas a las que no se les ocurra nada y quieran salir del paso, hoy les ofrecemos una receta fácil de cocinar y con la tendremos un éxito asegurado entre nuestros invitados. Hoy os damos la receta de un rico pollo al horno al limón. Para ello necesitaremos:

Sigue leyendo Muslos de pollo al limón

Canelones con albahacas y aceitunas

Uno de los platos más ricos y consumidos de la cocina italiana es la pasta. Quizás se nos ocurran un gran número de clases de pasta preparadas con un tipo de salsa y con ingredientes totalmente diferentes, a cada cual mucho más exquisito. Hoy aprenderemos a cocinar uno de esos platos más populares, los canelones. Esta vez los haremos rellenos de carne, albahacas y aceitunas.

Sigue leyendo Canelones con albahacas y aceitunas

Cocina sana: Alcachofas con chalotas y mostaza acompañado de ensalada

Ahora que ha llegado el buen tiempo y que estamos a pocas semanas de que empiece la temporada estival y la temporada de playa en las que queremos lucir palmito y ese cuerpo atlético que tanto deseamos, es hora de empezar a cuidar aún más si cabe nuestra alimentación y fortalecer nuestra agenda de ejercicios para ponernos en forma.

A la hora de hacer dieta, es muy importante que sigamos las recomendaciones de los médicos para evitar el indeseado efecto yoyó así como otras consecuencias negativas de las dietas. Pero más allá de las dietas, siempre podemos optar por una comida sana y equilibrada en la que comamos todo tipo de alimentos, sobre todo a base de frutas, verduras y pescados.

Sigue leyendo Cocina sana: Alcachofas con chalotas y mostaza acompañado de ensalada

Arroz pilav o pilaf

El arroz pilaf, o como siempre le ha llamado mi madre “pilav”,debe su significado simplemente a la palabra “arroz”. No hay mas misterio en el nombre. Pero no sabría decir cuál es el correcto.

Muchos dicen que es la forma de cocinar arroz hindú, otros que es una receta bosnia, rumana o turca…Pero en todas estas recetas que he observado llevan también fideos cabellin, cordero o hígado.

Yo os propongo cocinar el arroz de la forma que siempre he visto en casa. Un arroz simple y sabroso, ideal para comer solo o para ser guarnición de platos combinados, como cerdo y pollo. Ya que es un arroz meloso que da un toque de suavidad a estas carnes hechas a la plancha.

Ingredientes:

400 gr de arroz

Una cebolla

150 gr de mantequilla

1 litro de caldo de carne casero

Sal

Preparación:

  1. Pela y tritura la cebolla. Debe quedar en pedazos muy pequeños, por lo que te recomiendo que utilices una picadora manual o eléctrica. Si lo haces con cuchillo procura que esté bien afilado para que puedas cortar más fino y con mayor comodidad.
  2. Derrite 100 gr de mantequilla en una cazuela de fondo grueso y dora la cebolla picada, a fuego muy suave. Debe quedar muy blanda. Para que te hagas una ideas, su punto perfecto consiste en estar transparente, sin apenas color; es importante que la muevas continuamente y la aplastes con la espumadera.
  3. Echa el arroz y muévelo bien con una cuchara de palo, para que todos los granos se queden impregnados de la grasa y ligeramente transparentes. Esto es importante.
  4. Vierte el caldo, sazona con precaución y deja la cazuela en el fuego hasta que vuelva a hervir. Procura tener cuidado con la sal, ya que el caldo es por sí salado.
  5. Cuando comience a hervir, retira la cazuela del fuego y tápala con papel de barba engrasado, o papel de aluminio, redoblando los bordes alrededor de la cazuela.
  6. Mételo en el horno, previamente encendido y cuando ya esté caliente,unos 20 minutos.
  7. Sacarlo del horno y quitarle el papel. El arroz debe de estar bien seco.
  8. Distribuye sobre la superficie el resto de la mantequilla cortada en pedacitos y remueve el conjunto con dos tenedores para que los granos queden sueltos.

Como ya he dicho al principio, es un arroz que se puede complementar con más ingredientes. Así que os invito a, una vez hayáis probado la receta, experimentar.